CAMARGO, UNA OPORTUNIDAD A 15 AÑOS

En Camargo parece que el tiempo se detuvo. Las mismas calles, las mismas tiendas y la misma gente. Se va uno, regresa y Camargo sigue ahí. Aparentemente imperturbable. Ahí está nuestra gente, los grandes, dándonos la idea de que todo sigue igual. Eso es lo que nos han dicho y eso es lo que hemos querido ver.
Se dice que la gente de dinero no supo invertir en Camargo. Que esas familias adineradas no permitieron entrar competencia. Se dice que nuestras autoridades están tan cegadas por el poder y la lucha de partidos, que se les olvido gobernar para todos. Que la envidia entre camarguenses derrumba cualquier intento de innovación o crecimiento. En fin, se dicen tantas cosas para intentar explicarnos porque no hemos crecido, que a muchos jóvenes nos convencieron y hemos tenido que salir de aquí, esperanzados a encontrar afuera el desarrollo.
Cruelmente nos corrieron de nuestra tierra, convenciéndonos de que aquí no había futuro. Sin saberlo, los mismos camarguenses nos pusimos un tope para crecer. Convertimos en realidad eso que “se dice”, y frenamos nuestro bienestar. Por lo que “se dice” nos dio miedo intentar crecer.
Pero el tiempo y la realidad tienden a imponerse. Ese bloqueo que creamos con nuestras envidias, políticas y cultura “de cangrejo”, están siendo superadas por lo que está pasando en el exterior. La cada vez mas grande competencia económica, el estrechamiento de los mercados y los medios de comunicación, nos obligan a derrumbar esos bloqueos culturales que nos impusimos.
Camargo esta respondiendo a esa realidad y ha iniciado un cambio que paulatinamente se acelerara. Un cambio que podria durar unos 15 años mas. Veamos lo que ocurre y encontraremos las pistas de lo que viene. Nuestra infraestructura urbana se ha modificado para hacerse mas práctica. Nuestras viejas construcciones se están cayendo para dar paso a edificios actuales. Están entrando nuevos negocios con formas distintas de ver el comercio. Viene gente de todas partes y crea nuevas colonias. Una enorme cantidad de profesionistas ven en Camargo una oportunidad única de hacer lo que ellos saben hacer. Y sobre todo, los jóvenes vemos en esta tierra el sitio ideal para crear el futuro de nuestros hijos.
Hoy nuestra tierra nos reclama. Quienes nos fuimos, vimos otras cosas. Vimos progreso y queremos progreso. Los jóvenes queremos crear la tierra que le heredaremos a nuestros niños. Sabemos que hoy vivimos en el Camargo de nuestros padres, pero que está en nosotros el construir el Camargo de nuestros hijos.
Estamos ante un periodo de desarrollo acelerado, en donde nuestra ciudad deberá alcanzar el nivel de desarrollo que debía tener. Camargo soltó sus ataduras y durante los próximos años crecerá aceleradamente para estar en su nivel óptimo. El lugar que deberia tener de no haber hecho caso a lo que “se dice”. Nuestros vecinos crecieron y será difícil alcanzarlos, sin embargo, aquí tenemos una ventaja que en otros lados no. Aquí hay camarguenses que con toda nobleza y buena voluntad aprenderemos a trabajar juntos y hacia el mismo lado.